He añadido a la página de artículos del Centro, el Seminario que tuvo lugar el 7 de mayo de 2005, transcripto por Lluis Gisbert: Saturno Cronos, y el don de la melancolía
Allí puede leerse, entre otras cosas:
"Por lo tanto, la primera marca notable es que ya hay sénex en el intento de separar, de desconectar de la ambigüedad la propia imagen del sénex y con esto aparece otro de los rasgos más tremendos: su enorme, poderosa destructividad.
Cuando nos sentamos a planificar el futuro ¿desde dónde lo planificamos, cómo lo planificamos y a partir de qué lo planificamos? Inadvertidamente nuestro futuro imaginado literalmente no hace sino traer consigo la destrucción que ya está presente aquí mismo, en el acto de planificación.
La destrucción comienza en el sénex cuando el sénex se separa de su ambigüedad arquetípica. O sea, o literaliza y transforma en hechos, o pneumatiza y transforma en conceptos, pero en todo caso no refleja psíquicamente. Uno de los riesgos del sénex es por lo tanto su divorcio de la psique y ese divorcio es correr a un mundo de hechos (Capricornio) o ascender a un mundo de conceptos (Acuario)"