viernes, 21 de abril de 2006

La psicología de Jung


El miércoles 10 de mayo daré una conferencia gratuita sobre la psicología de Jung, que servirá de introducción a un curso sobre el pensamiento del innovador psicólogo, que escribió
"los factores inconscientes son hechos que ejercen poderes tan condicionantes como las fuerzas que regulan la vida de la sociedad; y los primeros son tan colectivos como los segundos. Por ello, así como puedo distinguir lo que mi función exige y espera de mí de lo que yo quiero, puedo aprender a hacer la distinción entre lo que yo quiero y lo mi inconsciente tiende a imponerme. Precisamente porque estas tendencias contrarias están secreta y subterráneamente en relación unas con otras, son susceptibles de encontrar su acuerdo en una cierta media, en un cierto compromiso que, de algún modo necesariamente, brota voluntaria o involuntariamente del individuo mismo, y del cual éste ha de tener una cierta presciencia intuitiva. Cada cual tiene un sentimiento de lo que debería ser, de lo que podría ser, de lo que uno debiera ser. No tener en cuenta esta intuición, descartarla y alejarse, es hacer un falso camino, es comprometerse en el sendero del error y, a corto o largo plazo, desembocar en la enfermedad"


El curso constará de 12 conferencias dedicadas a los temas más característicos de ese pensamiento: imaginación, conocimiento de sí, inconsciente colectivo y ánima mundi, simbolismo y alquimia. Puedes ver el programa picando aquí


Un saludo
Enrique

lunes, 17 de abril de 2006

Gaston Bachelard: acerca de la alquimia


He añadido a la página de artículos del Centro parte del cap. 2 de "La formación del espíritu científico" de Gastón Bachelard


El gran pensador francés, entre otras cosas, afirma: "Si la contemplación de un simple objeto, de un vaso olvidado a los rayos del poniente, nos proporciona tanta luz sobre Dios y sobre nuestra alma, ¡cuán más detallada y más evocadora será la contemplación de los fenómenos sucesivos en las experiencias precisas de la transmutación alquímica! Así interpretada, la deducción de los símbolos no se desenvuelve más sobre un plano lógico o experimental, sino más bien sobre el plano de la intimidad completamente personal. Se trata menos de una comprobación externa que de una comprobación interna. ¿Quién sabrá jamás qué es un renacimiento espiritual y qué valor de purificación tiene todo renacimiento, si no ha disuelto una grosera sal en su mercurio adecuado y si no la ha renovado en una cristalización paciente y metódica, espiando ansiosamente la primera condensación cristalina? Entonces hallar el objeto es verdaderamente hallar el sujeto: es encontrarse en el momento de un renacimiento material. Se tenía la materia en el hueco de la mano. Para que sea más pura y más hermosa, se la ha sumergido en el seno pérfido de los ácidos; se ha arriesgado su tesoro. Un día el ácido apiadado ha devuelto el cristal. El alma toda se regocija por la vuelta del hijo pródigo. El psicoanalista Herbert Silberer, en mil observaciones de singular penetración, ha mostrado así el valor moral de los diferentes símbolos alquímicos. Es significativo que todas las experiencias alquímicas se dejan interpretar de dos maneras: química y moralmente. Mas entonces surge la pregunta: ¿Dónde está el oro? ¿En la materia o en el corazón? Y en seguida, ¿cómo titubear frente al valor dominante de la cultura química? La interpretación de los escritores que describen al alquimista en la búsqueda de la fortuna es un contrasentido psicológico, La Alquimia es una cultura íntima. Es en la intimidad del sujeto, en la experiencia psicológicamente concreta donde ella encuentra la primera lección mágica".

Un saludo
Enrique

domingo, 2 de abril de 2006

Cursos para mayo 2006



Las lecciones de Oskar Adler: La astrología como ciencia oculta


Oskar Adler, autor de La Astrología como Ciencia Oculta (ed. Kier) fue un destacado músico austríaco, profesor de Arnold Schönberg, así como un inspirado astrólogo que fundió la tradición hermética con su peculiar visión romántica de la astrología.

Sus lecciones sobre el simbolismo de las lunaciones, eclipses, planetas y aspectos nunca se tradujeron al castellano, y son las que se leerán y comentarán en este ciclo de conferencias a cargo de Enrique Eskenazi
Consultar el programa



El Árbol de la Vida: Introducción a la Kabalah



La psicología de Jung

sábado, 1 de abril de 2006

Las virtudes de la cautela (James Hillman)


Acabo de traducir y publicar el artículo de James Hillman: "Las virtudes de la cautela".
En él puede leerse:
"Si despertáramos nuestros sentidos de su entumecimiento psíquico, de su anestesia, muchos de los productos y programas, y el mismo río del tiempo, acelerado en su curso por los poderes que rigen los gobiernos, los economistas, las corporaciones, los medios de comunicación y las industrias, se retardarían lo suficiente como para colarse por otros canales que aún no han sido regados y por ello nunca han tenido una oportunidad para florecer.
La anestesia parece necesaria para la fortaleza heroica. Como un caballo intermitente, con ojos puestos sólo en el premio, se abalanza presuroso hacia la fealdad -el mismo mundo que ha construido. Si se despertaran nuestras respuestas estéticas, no necesitaríamos las advertencias implicadas por el principio de precaución -ni las advertencias de Hipócrates ni los presagios socráticos. La respuesta estética humana individual alteraría el curso mismo de la historia y la forma de las cosas en medio de las que vivimos. Nuestras narices también, y nuestros ojos y oídos, son instrumentos políticos, protestadores. Una respuesta estética es una acción política. Como el daimon de Sócrates que indica sólo lo que no hacer, también sabemos instintivamente, estéticamente, cuando un pescado huele mal, cuando se ofende al sentido de la belleza. Hacernos cargo de estos momentos -y estos momentos ocurren cada día, dentro de cada asfixiante edificio de oficinas, sentados en sillas cojeantes, inundados por ruido insensible y alimentados con comida industrial- hacernos cargo de nuestras respuestas, estas reverberaciones estéticas de verdad en el alma, podría ser el acto cívico primario del ciudadano, el origen de la cautela y del mismo principio cautelar con su advertencia de detenerse, mirar y escuchar"

Así continúo con la traducción y edición de artículos y conferencias de James Hillman


Un saludo
Enrique