viernes, 17 de junio de 2011

Sobre la sincronicidad, y el "adentro" y el "afuera"

La noción (porque es una NOCIÓN y no una "cosa", ni una "energía") de sincronicidad, propuesta por Jung como una ley de conexión a-causla a fin de justificar la coincidencia significativa de "hechos externos" con "hechos internos", si bien rechazada por la comunidad científica (y no sin razones), ha sido aceptada como un dogma por los junguianos, y abusada en la cultura "New Age" y la "espiritualidad contemporánea" (esoterismo) a fin de justificarlo TODO como "mágico", "importante", "significativo" (siempre desde una perspectiva “personal”), de modo que incluso llega a desaparecer la noción de "coincidencia" (!)

Sin embargo la crítica más incisiva y hasta ahora definitiva de esta noción proviene desde "dentro" de la psicología analítica, en el riguroso análisis de Wolfgang Giegerich en el que funda la psicología como disciplina de la "interioridad".

Después de sus argumentos, quien no disponga de contra argumentos está seriamente invalidado en su uso de la "sincronicidad".
Es de hacer notar que el análisis de Giegerich posee también un considerable rigor filosófico en su estudio del texto del fragmento de Heráclito, otro punto a su favor.